Romanos 1:19-20… porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó. Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.
A Dios se conoce íntimamente por revelación, no por ideas humanas.
Vivimos en un mundo tan cruel donde las personas han perdido la idea original de quien verdaderamente es Dios. Muchas religiones nos han enseñado que Dios es un ser místico, otras nos han enseñado que Dios es solo letras y palabras, esto explica porque las iglesias están llenas de personas superdotados en la palabra, pero cautivos al pecado, rebeldes a las autoridades, llenos de envidia y celos, llenos de orgullo y resentimiento porque no han entendido que saber de Dios no es conocerlo íntimamente. Otras religiones nos han enseñado que Dios es cruel y dictador, los mismos creyentes han proyectado a un dios acusador, lleno de odio y maldad, y la mayoría de estas religiones tienen algo en común, están proyectando a un dios equivocado. Muy pocas de estas religiones la escuchamos hablar del amor incondicional, del sacrificio, de la compasión, del cambio, del perdón, del arrepentimiento, de la reconciliación, porque la mayoría de religiones han convertido la palabra en una tradición de hombres, no en una fuente de vida eterna. Cada vez que voy a la palabra Dios siempre habla a mi corazón, cada palabra que leo es una fuente de vida que corre en mi interior, muchas de esas veces me las paso llorando al ver el amor tan grande que Dios tiene hacia los hombres a pesar de que somos tan crueles y egoístas. El amor de Dios no tiene principio ni final, este amor nunca se rinde a pesar de que somos tan indiferentes a lo que Dios hace todos los días en nuestras vidas.
No vemos a Dios no porque no sea real, sino porque la tanta maldad, la dureza de nuestro corazón y los afanes de la vida han cerrado nuestros ojos para no verlo.
Muchas personas no creen en Dios por dos cosas: 1) Porque no pueden verlo físicamente y 2) Porque han cerrado sus ojos para no ver a Dios. Ellos no saben que Dios está en cada esquina de las calles viéndonos cruzar, está siempre guardándonos de la muerte, está siempre en tu habitación viéndote dormir, están siempre en tu trabajo mirando lo estresada que llevas tu vida. Dios está en cada abrazo de amor que te brinda una persona, en cada gesto de cariño que te brindan tus amigos y familiares, Dios está en cada ayuda que te brindan las personas ante cualquier dificultad, muchos tenemos la idea de que si no es cristiano entonces no es Dios que lo envía y es una mentira, Dios puede usar a cualquier persona que esté disponible para él.
Cuando entró el pecado al corazón del hombre, lo de Dios se fue perdiendo poco a poco con el pasar del tiempo, los hombres iban evolucionando en su maldad buscando nuevos medios para destruir y llenar su corazón. Cuando llego Jesús y murió en la cruz, él recupero todo lo que habíamos perdido en el huerto de Edén, la capacidad de relacionarnos con Dios sin extorsión alguna, ya que la falta de relación obligo al hombre a tomar su propio camino y no tener elección alguna más que escoger el camino que satanás le abrió. El hombre hoy en día es un ser lleno de maldad pero eso no quiere decir que lo sea en su totalidad, porque la semilla que Dios deposito en el principio aún no se ha muerto completamente, por eso hasta el hombre más cruel en este mundo tiene una parte de Dios dentro de él. Tenemos que saber que cuando un matrimonio es restaurado es porque Dios estuvo ahí obrando para reconciliar, Dios está en cada acto de justicia, cuando dos hermanos se abrazan después de haber tenido una palea es porque Dios estuvo ahí poniendo cada pieza en su lugar.
Cuando una persona sale bien de una sala de cirugía fue porque Dios uso las manos de los médicos para que todo salga bien. Cada vez que llega alimento a nuestra mesa fue porque Dios uso a alguien para que lo trajera a casa, cada vez que tienes la capacidad de comprarte los zapatos que te gustan es porque Dios quiso alegrarte con ese pequeño detalle, cada vez que nos levantamos y podemos ver la luz del Sol y respirar aire fresco todas las mañana es porque Dios le ha placido que disfrutes de todas sus maravillas, cada milagro que ocurre en nuestras vidas, la salud, la paz, el gozo, la felicidad, todo es parte de lo que Dios es, todo lo que puedes disfrutar hoy en día es gracia a la vida que Dios te dio. No es que Dios no sea real, es que hemos cerrado nuestros ojos para no verlo. Si entendiéramos esta verdad nos daríamos cuenta de que Dios no nos debe nada, al contrario, se lo debemos todo a él y sobrarán razones para darle gracias todos los días. La Palabra de Dios dice en Juan 4:24, que Dios es espíritu, por lo tanto, si Dios es espíritu entonces no podemos verlo, pero no borra la idea de que no podemos sentirlo a través de todo lo que él ha creado. Muchas personas al no entender esta verdad terminan construyendo estatuas o artefactos de madera buscando un medio físico de un supuesto dios para saciar su incredulidad, haciéndose abominables delante de Dios.
Dios está en cada gesto de amor que les brindamos y que nos brindan los demás.
Concluyo diciendo: ¿Dónde crees que está Dios ahora mismo? La idea equivocada que tenemos de quien es Dios nos ha hecho entender que no tenemos nada de que agradecerle a él. La ignorancia en la que estamos sumergidos nos ha hecho indiferentes a todo lo que Dios hace día a día en nuestras vidas. Si Dios no tuviera parte en el corazón del hombre este mundo fuera un completo caos. Si hay algo bueno dentro de nosotros, sin lugar a dudas es una parte de Dios en nuestro corazón. El hombre no tiene la capacidad de amar incondicionalmente, de sacrificarse por los demás, de ser generoso, de ser manso y humilde, ni satanás tampoco, por eso cuando vemos amor puro en este mundo tan cruel, es porque Dios es real y verdaderamente está vivo. No dejes que la tanta maldad cierre tus ojos para no ver a Dios y puedas mirar todo lo que él hace por ti todos los días.
Dios es más real que el aire que respiramos día a día, si crees en el aire que no puedes ver por qué no crees en el Dios que se levanta cada mañana junto a ti.
Oración: Gracias amado mío por todas tus maravillas, gracias por estar conmigo en cada momento, perdóname por todas las veces que me he sentido solo(a) aun cuando tu estas ahí parado junto a mí, perdóname por las veces que he negado tu existencia por verme envuelto en tantos afanes en el diario vivir, perdóname por decir que no existes cuando he clamado a ti y no ver una respuesta instantánea cuando a la verdad estas trabajando en el silencio, abre mis ojos cada día para verte constantemente, ahora que conozco tu verdad me sobrarán razones para darte gracias por todo lo que me has dado en esta vida y aun no lo que falta en la vida eterna, te amo mucho mi amado padre, en el nombre de Jesús amén.